Las materias primas juegan un papel crucial en la agroindustria de México, especialmente por sus funciones como micronutrientes, reguladores de crecimiento, fertilizantes orgánicos, y preservadores. A continuación, mencionamos la importancia de aplicarlos en los cultivos:
Micronutrientes: Estos elementos son esenciales para el crecimiento saludable de las plantas. A menudo, el suelo puede carecer de ciertos micronutrientes, por lo que aplicarlos ayuda a corregir estas deficiencias y garantiza que las plantas puedan realizar procesos metabólicos adecuados para su desarrollo. En Koprimo buscamos que la aplicación de micronutrientes sea de alta calidad para evitar la contaminación del suelo y el agua, así como para garantizar la seguridad alimentaria y la calidad del medio ambiente.
Reguladores de crecimiento: Estos compuestos son utilizados para controlar el crecimiento, desarrollo y maduración de las plantas. Pueden aumentar la producción, mejorar la calidad del cultivo y optimizar los procesos agrícolas.
Fertilizantes orgánicos: Los fertilizantes orgánicos son una alternativa sostenible a los fertilizantes químicos, ya que provienen de fuentes naturales. Estos fertilizantes no solo proporcionan nutrientes a las plantas, sino que también mejoran la estructura del suelo, promueven la biodiversidad microbiana y reducen la erosión. Su uso contribuye a la conservación del suelo y la protección del medio ambiente, además de promover prácticas agrícolas más sostenibles.
Preservadores: Los preservadores son utilizados para prolongar la vida útil de los productos agrícolas y evitar pérdidas durante el almacenamiento y el transporte. Es crucial utilizar preservadores que sean seguros tanto para los consumidores como para el medio ambiente, evitando el uso de sustancias tóxicas o nocivas.
En Koprimo son varios los productos que tenemos para ofrecer a la Agroindustria en México, acércate a nuestro equipo de especialistas para determinar las ideales para tus cultivos. Comercializamos materias primas de alta calidad, de manera responsable, considerando su impacto en el medio ambiente, la salud humana y la sostenibilidad a largo plazo del sector agrícola.
